You light up the room...

Este anuncio lo vi por primera vez hará un mes y no he podido dejar de verlo... me encantan las canciones y el vídeo en si mismo. He visto otros de esta campaña llamada "Cupidity" pero ninguno me ha llegado como este.
La verdad es que me encantan las historias de amor... Soy una romántica!

Olor a recuerdos

Por la ventana abierta entra, disimuladamente, un olor a verano pasado.

Pasado... pasado... tan pasado que no alcanzo a ubicar el momento al que se olor me quiere transportar, pero que, sin embargo, recorre mi cuerpo desde la punta de la nariz hasta asentarse en el estómago. Y es éste el que se encoge, hormiguea, reacciona y hace que todo mi cuerpo se embobe intentando volver a algún día que no puedo recordar. Aún así, recuerdos de nostalgia mezclados con tranquilidad.

¿Cómo puede ser que un olor, a veces, nos transmita mucho más que una imagen fija en nuestra mente? ¿Cómo puede ser que nos persiga una sensación tanto tiempo atrás olvidada?

Pudiera ser que los sentidos estén más avanzados que nuestra mente en el campo de los sentimientos.

Las pequeñas cosas

La vida da sus giros y se complica. La vida crece, se contrae, me mira de reojo y se pierde entre los sueños.
La vida siempre ha estado ahí para mí, ¿pero he estado yo a su altura?
La vida te pide que la agarres, que la mires, que la pienses, que la sientas...
La vida te pide y pide... pero tú no siempre has estado a su altura.

La vida me dice "A" y a ti "B" o "C" o "D"... o lo peor de todo: NO SABES LO QUE TE DICE. Y entre tus no saberes se me escapa la vida a mi también, porque yo lo sabía, tenía claro lo que me pedía, pero ahora ya no lo sé.

Y tú vienes, te vas, vuelves a aparecer y te vuelves a ir. Te has vuelto intermitente! Y yo estoy aquí, buscando lo que un día encontré, soñando lo que antes me dabas, viviendo en la sombra del pasado.

Te has vuelto intermitente y no te culpo. Tu vida nunca ha sido muy sencilla, tus pasos nunca han sido bien mimados, y tu mirada se ha perdido entre las aguas.

He intentado cuidarte, mirarte cada día como si fuera el primero, sentir tus labios como si fuese la última vez, vivir la vida inmersa en la locura.
He buscado entre mis brazos un lugar que te hiciese fuerte, que te hiciera quererte tan solo una pequeña parte de lo que yo lo hago, que te acercase a la felicidad...

¿Qué he conseguido? Ni yo lo tengo claro...