Las pequeñas cosas

La vida da sus giros y se complica. La vida crece, se contrae, me mira de reojo y se pierde entre los sueños.
La vida siempre ha estado ahí para mí, ¿pero he estado yo a su altura?
La vida te pide que la agarres, que la mires, que la pienses, que la sientas...
La vida te pide y pide... pero tú no siempre has estado a su altura.

La vida me dice "A" y a ti "B" o "C" o "D"... o lo peor de todo: NO SABES LO QUE TE DICE. Y entre tus no saberes se me escapa la vida a mi también, porque yo lo sabía, tenía claro lo que me pedía, pero ahora ya no lo sé.

Y tú vienes, te vas, vuelves a aparecer y te vuelves a ir. Te has vuelto intermitente! Y yo estoy aquí, buscando lo que un día encontré, soñando lo que antes me dabas, viviendo en la sombra del pasado.

Te has vuelto intermitente y no te culpo. Tu vida nunca ha sido muy sencilla, tus pasos nunca han sido bien mimados, y tu mirada se ha perdido entre las aguas.

He intentado cuidarte, mirarte cada día como si fuera el primero, sentir tus labios como si fuese la última vez, vivir la vida inmersa en la locura.
He buscado entre mis brazos un lugar que te hiciese fuerte, que te hiciera quererte tan solo una pequeña parte de lo que yo lo hago, que te acercase a la felicidad...

¿Qué he conseguido? Ni yo lo tengo claro...